El ghee y la mantequilla clarificada son dos productos lácteos ampliamente utilizados en la cocina, especialmente en la cocina india. Aunque a menudo se utilizan indistintamente, hay algunas diferencias entre ellos. En este artículo, te enseñaremos cómo hacer ghee o mantequilla clarificada casera y te explicaremos las diferencias entre ambos.
Diferencia entre el ghee y la mantequilla clarificada
El ghee y la mantequilla clarificada son dos formas de mantequilla que han sido procesadas para eliminar el agua y los sólidos lácteos, como la lactosa y las proteínas. Sin embargo, hay una diferencia clave entre ellos: el ghee se cocina durante un período más largo de tiempo, lo que le da un sabor más rico y un color dorado, mientras que la mantequilla clarificada se cocina durante un tiempo más corto y tiene un sabor más suave.
Otra diferencia importante es el origen cultural. El ghee es un ingrediente básico en la cocina india y se utiliza en una amplia variedad de platos, desde curries hasta postres. Por otro lado, la mantequilla clarificada es más común en la cocina occidental y se utiliza principalmente para cocinar y freír alimentos.
¿A qué sabe y para qué sirve el ghee y la mantequilla clarificada?
El ghee tiene un sabor rico y a nuez, con un ligero aroma a caramelo. Su sabor es más intenso que el de la mantequilla clarificada, lo que lo convierte en un ingrediente muy apreciado en la cocina india. El ghee se utiliza para realzar el sabor de los platos, ya que su sabor se mezcla bien con las especias y otros ingredientes.
La mantequilla clarificada, por otro lado, tiene un sabor más suave y neutro. Se utiliza principalmente para cocinar y freír alimentos, ya que tiene un punto de humo más alto que la mantequilla regular. Esto significa que se puede calentar a temperaturas más altas sin quemarse, lo que la hace ideal para freír y saltear.
Propiedades del ghee
El ghee tiene varias propiedades beneficiosas para la salud. A diferencia de la mantequilla regular, el ghee no contiene lactosa ni caseína, lo que lo hace adecuado para personas con intolerancia a la lactosa o alergias a la proteína de la leche. Además, el ghee es rico en ácidos grasos de cadena corta y medio, que se consideran más saludables que los ácidos grasos de cadena larga presentes en la mantequilla regular.
El ghee también contiene vitaminas liposolubles, como las vitaminas A, D, E y K, que son esenciales para la salud óptima. Estas vitaminas se absorben mejor en el cuerpo cuando se consumen con grasas, por lo que el ghee es una excelente manera de obtener estos nutrientes esenciales.
Aspecto y conservación del ghee
El ghee tiene un aspecto similar a la mantequilla clarificada, con un color dorado y una textura suave y untuosa. Se solidifica a temperatura ambiente, pero se derrite fácilmente cuando se calienta. El ghee se puede almacenar a temperatura ambiente durante meses sin estropearse, gracias a su bajo contenido de agua y a su proceso de clarificación.
Para conservar el ghee casero, es importante almacenarlo en un recipiente hermético y mantenerlo alejado de la luz y el calor directo. Esto ayudará a preservar su frescura y sabor durante más tiempo.
Ingredientes necesarios para hacer ghee casero
Para hacer ghee casero, solo necesitarás un ingrediente: mantequilla sin sal. Es importante utilizar mantequilla sin sal, ya que la sal puede afectar el proceso de clarificación y el sabor final del ghee.
La cantidad de mantequilla que necesitarás dependerá de la cantidad de ghee que desees hacer. Como referencia, 500 gramos de mantequilla producirán aproximadamente 400 gramos de ghee.
Pasos para hacer ghee casero
A continuación, te explicamos los pasos para hacer ghee casero:
- Coloca la mantequilla sin sal en una cacerola grande y caliéntala a fuego medio-bajo.
- A medida que la mantequilla se derrite, comenzará a formarse una espuma en la superficie. Retira la espuma con una cuchara o espumadera y deséchala.
- Continúa cocinando la mantequilla a fuego medio-bajo, revolviendo ocasionalmente para evitar que se queme.
- A medida que la mantequilla se cocina, verás que se forman dos capas: una capa inferior de sólidos lácteos y una capa superior de grasa clarificada. La capa inferior se volverá dorada a medida que se cocina.
- Una vez que la capa inferior esté dorada y la capa superior sea transparente, retira la cacerola del fuego.
- Coloca un colador de malla fina o una gasa sobre un recipiente de vidrio resistente al calor y vierte el ghee caliente a través del colador para separar los sólidos lácteos.
- Deja que el ghee se enfríe a temperatura ambiente antes de transferirlo a un recipiente hermético para su almacenamiento.
¡Y eso es todo! Ahora tienes tu propio ghee casero listo para usar en tus recetas favoritas.
Conclusión
El ghee y la mantequilla clarificada son dos productos lácteos versátiles y deliciosos que se utilizan en la cocina de todo el mundo. Aunque tienen algunas diferencias, ambos son excelentes opciones para cocinar y realzar el sabor de los platos.
Hacer ghee casero es un proceso sencillo que requiere solo un ingrediente: mantequilla sin sal. El ghee casero tiene un sabor rico y a nuez, y se puede utilizar en una amplia variedad de platos, desde curries hasta postres.
Recuerda almacenar el ghee en un recipiente hermético y mantenerlo alejado de la luz y el calor directo para preservar su frescura y sabor. ¡Disfruta de tu ghee casero y experimenta con él en tus recetas favoritas!